Modo de preparación
Prepara las verduras pelando y picando finamente la cebolla y el ajo (también se pueden usar cebollas y ajos tiernos durante la temporada de primavera).
Pela los champiñones y córtalos en trozos. Pica finamente las hojas de espinaca.
Calienta el aceite de oliva y fríe la cebolla y el ajo durante 4-5 minutos, luego pon a sofreír los champiñones durante un rato.
Agregue el arroz, revuelva durante uno o dos minutos, luego vierta el vino y revuelva nuevamente para ayudar a que el alcohol se evapore y el arroz suelte el almidón, lo que espesará la sopa de champiñones y la hará cremosa sin tener que espesarla con harina u otra cosa.
Para ello también es necesario que el propio arroz sea de grano redondo, apto para risotto, por ejemplo, ya que suelta más almidón, pero al mismo tiempo no hierve.
Vierta caldo o agua con cubitos de caldo de pollo seco.
Cuando el líquido hierva, agregue las espinacas, un poco de sal y cocine durante 15-16 minutos con la tapa puesta. Finalmente, agregue la mantequilla para darle sabor y más espesor.
Me gusta esta sopa más espesa, pero si lo desea, agregue más agua o caldo.
Sirva la sopa de champiñones, espolvoreando cada porción con perejil fresco picado y jugo de limón recién exprimido.
Sirva inmediatamente, porque si el arroz se queda en el caldo, lo absorberá.
¡Buen provecho con la sopa rápida de champiñones con vino blanco y espinacas!