Modo de preparación
Tamizamos la harina en un bol y la mezclamos con la levadura seca, la sal y el azúcar. Hacemos un hueco en el medio.
Mezclamos el yogur de búfala con el agua (ligeramente tibia) y vertemos en el pozo.
Amasamos una masa suave, medio-blanda y que no se pegue a la encimera ni a nuestras manos. Formamos una bola, engrasamos generosamente y volvemos a poner en el bol. Dejamos reposar en un lugar cálido durante 1 hora, cubierta con un paño limpio.
Extendemos la masa leudada hasta formar una hoja fina en forma circular (pero no demasiado fina tampoco) y con un cuchillo afilado cortamos tiras de unos 3 cm aproximadamente, yo saqué exactamente 8.
Cortamos la salchicha (2 piezas de 100 g cada una) a lo largo en dos, y luego a lo ancho en dos partes más, de las que obtendremos 8 piezas.
Cogemos una tira de masa y la envolvemos alrededor de cada trozo de salchicha. Disponemos en una bandeja cubierta con papel de horno y dejamos los bollos nuevamente en un lugar cálido durante 30 minutos hasta que dupliquen su tamaño.
Batimos el huevo con un poco de aceite y agua y con cuidado, sin presionar, pincelamos la superficie y espolvoreamos las semillas y el cebollino por encima.
Metemos en el horno precalentado a 130 grados, incrementándolo inmediatamente a 190. Horneamos durante 20-25 minutos o hasta que los bollos estén dorados.
Nada más sacarlos del horno rociamos ligeramente con agua y tapamos brevemente.
Calientes o ya fríos, ¡los bollos salados son igualmente deliciosos y sabrosos!
Los bollos salados con yogur de búfala y salchicha están listos.