Modo de preparación
Ponemos 1/2 taza de aceite de oliva a fuego muy bajito y le agregamos 1 ramita de albahaca. Para nuestra receta de focaccia necesitamos 4 cdas del aceite aromático, pero el resto que nos sobra podemos utilizar para otras recetas.
Mantenemos a fuego bajito durante 15 minutos sin que hierva, luego retiramos y dejamos enfriar pero no del todo. Sacamos la ramita de albahaca.
Echar la harina en un bol. Si es más fina la podemos tamizar, pero si tirar las escamas de trigo que han quedado en el tamiz.
Hacemos un hueco en el medio de la harina y dentro echamos el agua ligeramnete tibia, el azúcar y la levadura desmenuzada. Removemos y dejamos leudar cubriendo el bol con un paño limpio.
Luego agregamos 2-3 cdas del aceite de albahaca y removemos con una cuchara de madera. Finalmente ponemos la sal.
Transferimos la masa a una superficie enharinada y amasamos durante 5 a 8 minutos o hasta que deje de pegarse. Tratamos de no poner demasiada harina en el proceso de amasado.
Engrasamos las manos con el aceite de albahaca y colocamos la masa en una bandeja forrada con papel de hornear. Extendemos con la manos para obtener una focaccia plana y finita. Precionamos con los dedos para hecer huequitos y colocamos unos tomates cherry - enteros o partidos en dos. Untamos generosamente con aceite y dejamos leudar durante 1 hora.
Horneamos a 190 grados durante 20 minutos o hasta que la focaccia esté dorada. ¡Cuidado, no horees demasiado para que no quede seca y dura!
Retiramos del horno, rociamos con aceite de albahaca y tapamos con un paño hasta que se enfríe.
Servimos el pan italiano adornado con hojas frescas de albahaca.
¡Buen provecho!
