Modo de preparación
Horno - 180 grados;
Molde de bizcocho - 33-35 cm.
Ponemos la carne picada en un bol grande. Agregamos los huevos, la cebolla picadita y el ajo prensado con un poco de sal. Luego añadimos el pan rallado, el ketchup, la leche, las especias italianas, sal, perejil picado y pimienta negra recién molida.
Mezclamos bien con las manos, cubrimos con film transparente y guardamos en la nevera durante unos 20 -30 minutos para que la carne absorba las especias.
A continuación, pasamos la mezcla a un molde bien engrasado con aceite de oliva. Alisamos bien y precionamos para que la carne cubra todos los huecos del molde.
Metemos en el horno precalentado a 180 grados y horneamos durante 40 minutos.
Mientras tanto, preparamos el glaseado.
En un recipiente ponemos el ketchup, el vinagre balsámico, el azúcar moreno, el jo y cebolla en polvo, la pimienta negra y un poco de sal. Mezclamos bien.
Una vez que el pudín de carne esté hecho, lo sacamos del horno y vertemos el graseado encima de manera uniforme. Volvemos a meter en el horno por otros 15 minutos.
Luego sacamos del horno y dejamos reposar 15 minutos antes de servir y cortar el pudín.
Servimos el pudín salado con unas patatas Bujalance.
En lugar de ketchup he utilizado salsa Chili Barbecue ya que es más sabrosa y ligeramente picante. Para mi gusto es muy adecuada para este plato.
Lo que nos queda es disfrutas de este rico pudín de carne con glaseado.