Modo de preparación
Esta es una idea para un aperitivo rápido que es lo más sencillo, pero queda muy bonito en la mesa y nos agrada en aroma y sabor.
El queso que uso es fresco, hecho en casa y muy ligeramente salado, pero supongo que le iría bien cualquier queso blanco, previamente remojado en agua para que se ablande y reduzca la salinidad (si es salado).
Limpia los champiñones con un cepillo especial. Se limpian con un paño limpio y húmedo o se pelan. Retire el tronco.
Colóquelos en una sartén con la abertura hacia arriba y coloque un pequeño trozo de mantequilla, un poco de sal y pimienta en cada champiñón, luego espolvoree con ajo en aerosol.
Corta el queso en trozos y rellena los champiñones con él. Espolvorea ligeramente con pimentón y volver a espolvorear los champiñones rellenos con el ajo.
Precalienta el horno a 190 grados - calor superior e inferior. Rocíe los champiñones rellenos con aceite de oliva y hornee durante 15-17 minutos o hasta que el queso tome una costra dorada y se extienda ligeramente.
Los champiñones no deben encogerse, sino permanecer jugosos y tiernos.
Los champiñones rellenos de queso se sirven calientes con tu bebida favorita.
¡Disfrute de su comida!