Modo de preparación
Dejo leudar la levadura en la leche ligeramente tibia, en la que pongo el azúcar (o sólo 1 cucharada si vamos a hacer una masa no dulce) y una cucharada de harina.
A mano o con batidora empiezo a mezclar la mitad de la harina, la sal, un huevo y la levadura activada.
Agrego la mantequilla derretida y más harina hasta obtener una masa agradable, suave pero no pegajosa.
Dejo que la masa de los bollos duplique su volumen en un lugar cálido.
La dividí en cuatro partes (podría ser menos o más), depende de qué tan grande quieras los bollos dulces.
Extiendo con el rodillo cada parte en una hoja fina - rectangular o redonda. En cada rectángulo, pongo una cucharada de mermelada favorita (en mi caso - mermelada de frambuesa) en la parte más ancha y enrollo.
Dispongo los bollos en una bandeja (yo usé la bandeja del horno) y los pinto con el huevo batido.
Horneo los bollos perfectos con mermelada en un horno precalentado a 180ºC hasta que estén listos.