Modo de preparación
Preparar el almíbar poniendo a fuego medio el agua y el azúcar. Cortar las naranjas en rodajas finas y colocarlas dentro tan pronto como el azúcar se derrita. Dejar que el almíbar hierva durante 10-15 minutos, reduciendo un poco el fuego. Las naranjas deben ablandarse y liberar todo su sabor, pero no deben partirse y romper su integridad.
Retirar del fuego, sacar y escurrir los trozos de fruta y reservar.
En un bol, batir los huevos con el azúcar hasta que se pongan blancos y casi tripliquen su volumen. Directamente sobre ellos tamizar la harina con la levadura y mezclar cuidadosamente con una cuchara de madera.
Agregar la mantequilla derretida, las almendras, las semillas de cardamomo y la piel de naranja rallada y mezclar nuevamente.
Cubrir una fuente redonda con un diámetro de 25 cm con papel de hornear, papel de aluminio o simplemente engrásela generosamente.
Disponer las rodajas de naranja en el fondo y los lados de la sartén, presionándolas ligeramente hacia abajo para que se peguen. Echar la mezcla dulce sobre ellas y hornear a 170 grados en el horno precalentado durante unos 40-45 minutos o hasta que al pinchar con un palito, éste salga seco.
Retirar del horno y dejar enfriar un poco sobre una rejilla (4-5 minutos), luego desmoldar y mojar con el almíbar.
Dejar enfriar por completo antes de servir.
¡El pastel de frutas es adecuado para postre ligero con su aroma fresco y discreto! Su textura es tierna y se deshace en la boca.
También lo he preparado sin las almendras, aumentando un poco la harina. ¡El resultado es igual de hermoso! Espero que lo pruebes, lo compartas y te guste!
El pastel de naranja con cardamomo está listo para servir.
