Modo de preparación
Esta idea de aperitivo es muy fácil de ejecutar cuando se utilizan espárragos de conserva ya preparados.
Los frescos tampoco son difíciles, siempre que puedas encontrarlos en el mercado. Elige unos más gruesos, en mi caso 8 piezas de un peso total de 400 g.
Pelarlos con cuidado con un pelador de verduras, guardando las puntas y cortando la parte dura de la base.
Hervirlos en agua con sal añadiendo también una pizca de azúcar. Deben ablandarse un poco, el tiempo de cocción depende del grosor y nuestros espárragos más grandes tardarán unos 15 minutos.
Es bueno tenerlos en posición vertical con las puntas hacia arriba porque se pueden cocinar más rápido que el tallo y romperse, lo cual no es deseable, así que sumergirlos en el agua en los últimos 5 minutos.
El fuego debe ser moderado.
Los espárragos blancos listos se enfrían por completo.
Se extienden trozos grandes y finos de jamón cocido (se puede utilizar cualquier otro filete, por ejemplo de pavo), se untan con mayonesa y se colocan los espárragos uno en cada loncha de jamón, luego se envuelven para formar un rollito.
Colóquelos en un plato y decore con hojas frescas de rúcula y espinacas baby y tomates cherry alrededor.
El rollito de espárragos y jamón se rocía con aceite de oliva y se espolvorea con pimienta negra recién molida.
El aperitivo se sirve frío en la mesa festiva y se coloca la decoración al final para que las hojas verdes no se marchiten.
Buen provecho con este Aperitivo de espárragos blancos y jamón cocido.