Modo de preparación
Verter dos litros de agua en una cacerola grande, agregar la sal y el aceite y llevar a ebullición. Añadir los macarrones y cocer durante 7-8 minutos removiendo periódicamente.
Colar la pasta y colocarla en una fuente apta para hornear. Agregar el queso troceado o desmenuzado y la mantequilla cortada en cubitos. Mezclar muy bien.
Para la mezcla de flan, batir los huevos con el azúcar y la vainilla.
Agregar la leche poco a poco y seguir batiendo con unas varillas hasta que el azúcar se haya derretido y la mezcla esté homogénea.
Verter la mezcla en la fuente con los macarrones y revolver con cuidado.
Introducir en el horno precalentado a 220 grados y hornear el postre hasta que esté dorado en la superficie.
Dejar enfriar los macarrones al horno, cortar en porciones y servir.
Esta es la receta clásica de macarrones dulces al horno que conocemos desde que éramos niños. ¡Buen provecho!