Modo de preparación
Limpiamos bien las ancas de rana. Mi marido suele recogerlos del río y los limpia, quitándoles las piel.
Batimos los huevos en un bol. En otro ponemos bastante harina. Pasamos las ancas de rana primero por la harina y después por los huevos batidos.
Calentamos aceite abundante en una sartén y sofreímos las ranas hasta que estén doradas.
Sacamos con una espumadera y ponemos sobre papel de cocina absorbente.
Servimos calientes.