Modo de preparación
Preparamos la masa de pie agregando azúcar, sal y mantequilla en trocitos a la harina.
Trituramos con las manos hasta obtener migas y agregamos el agua helada y el vodka. Amasamos brevemente hasta obtener una masa quebrada y la envolvemos en papel de aluminio. La metemos en la nevera durante 1 hora.
Pelamos las manzanas y las cortamos en trozos medianos. Rociamos con jugo de limón.
Ponemos la mantequilla en una sartén de teflón y la derretimos. Agregamos las manzanas troceadas y mezclamos.
Cocinamos a fuego lento las manzanas, revolviendo ocasionalmente, hasta que se ablanden un poco. Luego añadimos el azúcar, la piel de naranja y la canela. Guisamos durante otros 1-2 minutos y agregamos la maicena, revolvemos y cocinamos durante otros 1-2 minutos.
Colamos las manzanas del líquido y reservamos a un lado.
Ponemos el líquido en el fuego en la misma sartén y removemos hasta que espese y se obtenga una salsa espesa de caramelo.
Echamos la salsa sobre las manzanas y revolvemos.
Sacamos la masa del refrigerador y extendemos sobre una superficie enharinada hasta obtener una lámina grande y redonda.
Colocamos la lámina en un molde de pie previamente engrasado y formamos la base.
Cortamos el exceso de masa, la juntamos en una bola, la estiramos y luego cortamos tiras para la parte superior del pastel.
Vertimos el relleno sobre la base de masa y nivelamos.
Colocamos las tiras de masa en forma de cruz encima.
Batimos el huevo con el aceite y pincelamos las tiras de masa.
Mezclamos el azúcar y la canela y espolvoreamos generosamente sobre nuestro pie de manzana.
Precalentamos el horno a 180 grados y horneamos la deliciosa tarta durante unos 30 minutos.
Servimos el pie de manzana festivo mientras está caliente o pasadas unas horas, cuando haya cuajado. Combina muy bien con una bola de helado.