Modo de preparación
Los tomates se lavan, se secan y se cortan en discos de unos 6-7 mm de espesor. Disponerlos en una bandeja cubierta con papel de hornear y espolvorear con un poco de sal y tomillo, luego echar un chorro de aceite de oliva.
El queso de cabra también se corta en rodajas de grosor similar o ligeramente más grueso. Se coloca un trozo de queso encima de cada tomate y se espolvorea generosamente con azúcar moreno y más especias aromáticas.
Los canapés de tomate y queso de cabra listos se rocían con aceite de oliva y se hornean a 200 grados en un horno precalentado hasta que el azúcar se derrita y se forme una costra.
El aperitivo se sirve con tostadas.
Dependiendo del sabor salado del queso que tengas, podrás utilizar sal o no. Personalmente creo que tiene que haber un contraste dulce/salado, así que si me encuentro con un rollito de queso de cabra menos salado, intento condimentar bien los tomates.
¡Rápido, muy fácil y delicioso!
