Modo de preparación
Calentamos la leche con la mantequilla a fuego medio. Removemos hasta que esté todo bien integrado y la mezcla esté a punto de hervir. Entonces añadimos la harina de una sola vez junto con el azúcar y la sal.
Reducimos el fuego y seguimos removiendo con unas varillas de mano hasta que se forme una masa que se despegue de las paredes de la cacerola .
Retiramos del fuego y dejamos templar 10 minutos.
Vamos agregando los huevos uno a uno sin parar de batir. No añadimos el siguiente hasta que no se haya unido el anterior a la masa.
La masa choux resultante es bastante pegajosa. La echamos en una manga pastelera con boquilla la mitad rizada, la mitad lisa. Formamos unas tiras de 4 cm de longitud en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Dejamos unos 4-5 cm de espacio entre cada éclair porque en el horno van ha aumentar su volumen.
Horneamos a 200 grados en el horno previamente precalentado. Los éclairs deben hincharse más del doble y obtendrán un color dorado, están listos normalmente en 20-25 minutos. ¡No abrimos la puerta del horno durante el proceso de horneado!
Después de pasar los 20-25 minutos, apagamos el horno y abrimos la puerta, pero no del todo. Esperamos así unos 10 minutos, luego retiramos la bandeja del horno y dejamos enfriar completamente los éslairs.
Una vez fríos los abrimos por la mitad con un cuchillo y rellenamos con nata montada, crema pastelera u otra crema al gusto. Aunque es poco común, los éclairs se pueden rellenar también con cremas saladas, mousse salada, patés. Así se convierten en un aperitivo estupendo.
¡Buen apetito!