Modo de preparación
Cubrimos un colador grande con un trozo de gasa y colocamos sobre un recipiente grande (por ejemplo un bol hondo).
Vertemos la leche y la nata para cocinar en una olla, agregamos la sal y calentamos a fuego medio, removiendo de vez en cuando para evitar que se queme.
Dejamos que se caliente poco a poco hasta llegar a los 90 grados de temperatura.
Apagamos el fuego y vertemos el vinagre. Revolvemos ligeramente para mezclarlo bien con la leche.
Dejamos reposar durante 10 minutos.
Vertemos el queso en el colador (cubierto con la gaza) y dejamos escurrir en el bol de 20 a 60 minutos.
Cuanto más tiempo permanece la mezcla en el colador, mas espesa será la ricotta casera.