Modo de preparación
Lavamos el filete de pescado bajo el chorro del grifo con agua muy fría. Secamos muy bien y untamos generosamente con aceite de oliva. Si lo que tienes es un filete grande, puedes partirlo en dos. Así se obtienen dos porciones por 200 g cada una.
Trituramos o picamos los fritos secos y rebozamos los filetes de salmón cubriéndolos con una capa uniforme.
Colocamos el pescado en una fuente de horno engrasada, espolvoreamos con sal y horneamos a 200 -220 grados durante 12 minutos o dependiendo del grosor de los filetes.
Servir el salmón con frutos secos caliente con una guarnición a su elección. Decorar con rodajas de limón.
¡Buen provecho!