Modo de preparación
Para las albóndigas, ponemos la carne picada en un bol y mezclamos con la cebolla picada, las especias, sal, el huevo, el pan rallado y pan normal, remojado con agua o leche.
Amasamos bien y formamos albóndigas redondas un poco más grandes que una nuez (o tamaño al gusto).
Colocamos las bolitas de carne en una fuente apta pata hornear.
Preparamos la salsa Bechamel calentando un poco de aceite y los 150 g de mantequilla. Agregamos la harina y sofreímos bien.
Vertemos la leche y vamos batiendo con unas varillas de mano a fuego lento hasta que la salsa espese. Sazonamos con las especias y sal y vertemos sobre las albondigas. Repartimos el queso rallado encima.
Precalentamos el horno a 200 grados y horneamos hasta que las albondigas estén listas y el queso bien gratimnado y dorado. Finalmente, espolvoreamos con perejil fresco picado.
Las albóndigas con Bechamel están listas.
