Modo de preparación
Cortar el puerro en trozos o rodajas finas. Fríalo en el aceite de oliva caliente, junto con una pizca de sal o dos para ayudar a que se ablande rápidamente.
Cuando esté casi listo, vierte la harina y remueve durante unos 2 minutos, hasta que adquiera un color ligeramente dorado y un olor agradable.
Vierte la leche poco a poco removiendo intensamente hasta obtener una bechamel espesa. ¡Esto debe hacerse a fuego lento!
Pon las especias y una vez que estén bien integradas, retira del fuego.
Corta el huevo en trozos pequeños y añádelo a la mezcla. Rectifica de sal. Luego deje enfriar y mete en la nevera durante al menos 30 minutos para que cuaje bien. El recipiente debe estar cubierto para que no se forme una costra.
Preparar 3 platos para el empanado: uno con 2 huevos batidos, el otro con harina y pan rallado respectivamente.
Para darle la forma clásica de croqueta, saque la mezcla con una cuchara y sosténgala en un puñado. Cuando cierres el puño no debe salir ningún exceso, pero si sale, retíralo. Dale forma a mano en una forma regular, ligeramente oblonga, como en las fotos.
Cuando todas las croquetas estén formadas, empezar a pasarlas primero por harina, luego por huevo y finalmente por pan rallado. Disponer en un plato y solo cuando estén todas dispuestas en el plato se puede empezar a freír.
Fríe en aceite bien caliente hasta el dorado deseado.
Sirva con salsa de mayonesa y disfrute de este maravilloso refrigerio.
Nota: Si no vas a freír todas las croquetas resultantes, reserva algunas y congélalas. ¡Cuando se descongelan, todavía están frescas y sabrosas!