Modo de preparación
Llamamos pasta brisa a la masa quebrada a partir de la cual hacemos bases de quiches, tartas, tartaletas o galletas de mantequilla.
Cuando se hornea, se vuelve crujiente y se derrite en la boca, de ahí su nombre.
Esta masa de mantequilla se puede preparar de varias maneras diferentes: con o sin huevos, con o sin agente leudante y con o sin un líquido como agua o leche (en caso de que se agregue, siempre es muy poco). Además, dependiendo de la receta que estemos haciendo, le añadimos azúcar o sal.
En este caso, os presento una receta de masa quebrada dulce, que os servirá de base para una tarta.
Tamiza la harina en un bol y mézclala con el azúcar en polvo (azúcar glass).
Corta la mantequilla fría y dura en trozos y frote con los dedos hasta obtener migas.
Agregue las yemas de huevo y muy poca leche y combine en una masa. Tiene un aspecto ligeramente desmenuzable y es muy agradable.
Para conseguir el efecto arena en nuestra masa, necesitamos enfriar previamente la masa. Esto también ayudará a que sea más fácil de manipular más adelante.
Después de cubrir el molde con la masa extendida con el rodillo, vuelva a colocarla en el refrigerador durante 30 minutos, o en el congelador durante 15 minutos.
También hay opciones para rallar parte de la masa encima de la crema o el relleno de la tarta, y así al hornear conseguimos un efecto arena aún mayor.
Las bases de tarta de masa quebrada son siempre finos y no necesitan más de 15 minutos en el horno a una temperatura de 180ºC.
Con algunas quiches o tartas puede haber rehorneados junto con el relleno que contendrán, por lo que se debe tener en cuenta que el tiempo de horneado no debe superarse en más de 5-10 minutos. También depende del grosor de la capa de masa quebrada.
Haz maravillosas y deliciosas tartas con esta pasta brisa.
¡Buena suerte!