Modo de preparación
Bate los huevos hasta que estén licuados pero no esponjosos. Echarles la leche y la nata y verter el azúcar. Volver a batir hasta que el azúcar se derrita por completo.
Si no quieres que tu flan sea tan dulce, puedes reducir la cantidad de azúcar y comprobar el dulzor del puré de calabaza: hay calabazas que son menos o más dulces.
Caramelice el azúcar restante (80 g) hasta que esté dorado y viértalo en el fondo de un molde para pastel rectangular grande. Cuando endurezca, vierte la mezcla de flan y coloca el plato en otro más grande con agua, suficiente para llegar a la mitad del molde con el flan.
Mete en el horno precalentado a 130 grados y hornee durante 2 horas, aumentando a 140 grados.
De esta forma evitaremos que el agua hierva y se formen muchas burbujas.
Es bueno vigilarlo y ponerle un poco de hielo un par de veces.
El flan de calabaza estará listo cuando sienta que se ha vuelto espeso al tacto, pero no demasiado duro.
Apague el horno y deje que se enfríe por dentro, luego refrigere para que el postre se enfríe completamente antes de invertirlo en un plato y servir.
¡Buen provecho con este exclusivo flan de calabaza con nata!
* Importante para el éxito de esta receta es que el puré de calabaza sea espeso, no aguado ni demasiado líquido.