Modo de preparación
Horno 175 grados.
Bandeja plana forrada con papel de hornear.
La masa se puede amasar con máquima amasadora/batidora o a mano.
Poner toda la harina, el azúcar y la vainilla en el bol de la batidora. Mezclar con la paleta de la batidora a velocidad baja, luego agregar 200 g de mantequilla blanda en cubitos.
Calentar la leche a 37 grados y añadir la levadura. Remover con un batidor de varillas hasta que se disuelva.
Agregar la leche con la levadura en un chorrito a la harina. Batir a velocidad baja durante un tiempo hasta que se acabe la leche y los productos se mezclen bien hasta obtener una masa suave. No es necesario añadir más harina. Cubrir con papel de aluminio y dejar reposar unos 60 minutos, tal vez un poco más.
Mientras tanto, preparar el relleno. Picar finamente, los orejones, rallar el mazapán, poner las pieles de limón confitadas, las almendras finamente picadas y los pistachos. Mezclar y amasar como si fuera una masa (porque el mazapán es como una masa).
La masa leudada se extiende sobre un poco de harina, aunque queda mantecosa y no se pega, en un cuadrado de 30/30 cm y se distribuye todo el relleno. Como el relleno queda bastante apretado, córtelo en trozos muy pequeños con las manos y extiéndalo sobre la masa.
Doblar la parte superior de la masa casi hasta la mitad. Luego se dobla la parte inferior del cuadrado, primero girándolo hacia adentro y luego un poco sobre la parte superior doblada del cuadrado. De modo que se forman dos túneles de stollen, uno de los cuales cubre al otro. Aquí también puedes utilizar un rodillo para darle forma mejor al característico pliegue. Se presionan los lados hacia adentro para que no se salga el relleno. Pasar a la bandeja y dejar reposar unos 30 minutos.
Hornear a 175 grados durante unos 75 minutos, para mí el tiempo de horneado fue de unos 55 minutos.
Mientras tanto también se prepara la parte decorativa de las estrellas de mazapán. Extender con el rodillo los 50 g restantes de mazapán sobre un poco de azúcar glass o almidón natural, para que no se pegue a los dedos, hasta formar una costra fina. Cortar formas con un molde de estrella pequeño y espolvorear las estrellas con cacao. Dejarlas a un lado.
Un stollen bien horneado es oscuro por arriba y por abajo.
Derretir los 150 g restantes de mantequilla y esparcir generosamente la mantequilla caliente con un pincel. La parte superior se espolvorea generosamente con azúcar en polvo, seguida de otra porción de mantequilla derretida y otra porción generosa de azúcar en polvo. Esto continúa hasta que se agota la mantequilla y se termina con una generosa pizca de azúcar en polvo y el stollen tiene una bonita corteza blanca. La parte superior se decora colocando las estrellas de cacao.
Dejar enfriar a temperatura ambiente, luego envolver bien en papel de aluminio, luego en film transparente y cololocarlo en una bolsa de plástico o guardarlo en una caja hasta que lleguen las fiestas de Navidad en un lugar fresco.
Notas del autor
Existen muchas recetas de stollen. Esta receta de stollen de Dresde es una variación del mundialmente famoso stollen con mazapán y relleno opcional de frutos secos. Elegí usar arándanos rojos en lugar de orejones, es una cuestión de gustos.
En esta receta el mazapán se ralla, pero queda mejor si se prepara en forma de panecillo y así se coloca entre las dos masas moldeadas, en la típica forma de stollen. Seguí la receta como aparece en la fuente, pero si hago otra pondré el mazapán en rollo porque creo que sienta y queda aún mejor, no se derrite al hornear.
Hay mucha mantequilla en la receta, pero le da ese sabor único que todo stollen debe tener, y en ningún caso se debe sustituir por otro tipo de grasa.
El mazapán para postres se vende en casi todos los grandes supermercados.
Este tipo de mazapán es una masa dura y generalmente se extiende sobre azúcar en polvo o maicena, pero yo por conveniencia arranco un trozo y lo amaso entre los dedos, así se ablanda y es fácil de extender hasta obtener el espesor deseado.
Cualquier stollen hay que conservarlo fresco y durante más tiempo, reposar para que se desarrollen los aromas de las especias, aunque esta receta en concreto es un poco pobre en ellas y por eso no resulta empalagoso, pero sí tierno, sabroso y fácil de hacer.
