Modo de preparación
Pelar y cortar las peras en cubitos. Rociar los trozos de fruta con jugo de limón recién exprimido y untar con la miel.
Cortar el queso en cubitos del mismo o parecido tamaño como los taquitos de pera.
Pinchar los trozos de fruta y queso gorgonzola en unos palillos o brochetas finas, alternando de una manera que más te guste.
Servir en una comida o cena elegante decorando el plato con hojas de rúcula y acompañando con un buen vino.
¡Buen provecho!