Modo de preparación
Batir los huevos con el azúcar. Añadir la miel, previamente derretida, el aceite y luego mezclar.
Primero mezclamos la harina tamizada con la mezcla de especias, luego la agregamos a los ingredientes líquidos.
Amasar una masa medianamente blanda, agregando más harina si es necesario (el objetivo es poder formar figuras a partir de la masa).
Formar con ayuda de moldes o cortadores de galletas y disponer sobre una bandeja forrada con papel de horno.
Hornear en horno precalentado (a unos 180-200 grados, dependiendo de la potencia del horno) durante unos 7-8 a 10 minutos, no más. No dejes que las galletas de miel se doren, de lo contrario se mantendrán duros y su sabor cambiará.
Después de que hayan endurecido un poco, sacarlas de la bandeja. Para empezar a decorarlos, eso sí, deben estar completamente fríos, por lo que podéis hacerlos incluso el día anterior.
Coge los colorantes, deje volar tu imaginación y decora las galletas de jengibre como más te guste. Para las decoraciones usé coco rallado de colores, flores para decorar pasteles, harina de almendras, fideos de azúcar/chocolate. El colorante/tinte en sí después de la aplicación es espesa y pegajosa.
Los glaseados que usé se secaron en unas pocas horas, después de lo cual las galletas se pudieron almacenar fácilmente en una caja durante algunas semanas.
¡Las galletas de miel para fiestas de Navidad son increíbles!