Modo de preparación
Todos tienen sus recetas clásicas favoritas que suelen preparar en casa. La moussaka clásica es sin duda uno de esos platos amados y queridos por la mayoría de la gente.
También comparto con ustedes mi moussaka clásica.
Pela las patatas y colócalas en un recipiente grande con agua.
Pica finamente la cebolla y fríela en el aceite hasta que se ablande y adquiera un color tostado muy claro (a veces le agrego una zanahoria junto con la cebolla)
Yo pongo carne picada, especias, perejil picado, sal y puré de tomate, o tomate rallado, que debe estar jugoso y bien maduro. Si quiero potenciar el sabor, añado una cucharada de concentrado de tomate.
Revuelva enérgicamente con una cuchara de madera para dorar la carne picada y desmenuzarla. Echa también un poco de agua mezclada con el puré de tomate que queda en las paredes del tarro.
Corte las patatas en cubos pequeños y agrégueles a la carne picada, mezclando bien.
Aquí es el momento de mirar exactamente cuántas patatas agregar - si predomina la carne picada, pele y corte más para que la proporción sea uniforme y ni una ni la otra sobran.
Sazone con más sal y especias, si es necesario, y transfiéra la mezcla a una bandeja. Echa agua, suficiente para cubrir los productos, y mete en un horno precalentado a 190 °C.
Después de unos 40 minutos, si el líquido aún no ha hervido, subo los grados a 210 y dejo que el agua se evapore rápidamente.
Luego viene la cobertura, para la cual bata bien todos los ingredientes y cubra la moussaka.
Hornea hasta que tome una costra dorada, retire del horno y cubra con papel aluminio y encima con una toalla por 10-15 minutos.
Sirva la moussaka casera con un buen y espeso yogur y una pizca de perejil fresco picado.
¡La moussaka clásica es verdaderamente irresistible!