Modo de preparación
Dado que las chuletas de cerdo de la parte del lomo no son los cortes más grasos de un cerdo, deben marinarse bien para que queden tiernas en caso de prepararlas en el horno.
Póngalas en una fuente de horno engrasada con aceite de oliva, espolvoree con pimienta negra, azúcar, comino, más aceite de oliva y tomillo. Cubra con la cebolla cortada en finas medialunas y ralla encima un bonito tomate jugoso.
Todo esto se cubre con vino, preferiblemente vino de calidad.
Envuelva con film transparente y deja en la nevera durante 1 día.
Las chuletas marinadas se sacan a temperatura ambiente durante 30-40 minutos.
Precaliente el horno a 200 grados y ponga la bandeja dentro tal cual, con el adobo, solo se puede rociar con un poco de aceite de oliva (tal vez un poco de sal también). En general, me gusta agregar sal al final para que no extraiga los jugos de la carne, por eso no la agrego al adobo.
Hornea a esta temperatura durante 15 minutos y luego reduce a 180 grados durante otros 35 minutos. Si tus chuletas son más finas, reduce el tiempo para no resecarlas.
Las chuletas de cerdo terminadas tienen un bonito color rosa oscuro por fuera, pero son blancas por dentro. Increíblemente sabrosas.
Sírvalas con ensalada fresca o patatas y disfrútelas al máximo.
¡Disfrute de su comida!