Modo de preparación
Cocer las patatas peladas y cortadas en trozos grandes en agua con sal. Prensarlas con una prensa de patatas junto con un trozo de mantequila.
Agregar la leche y batir hasta obtener un puré de patatas esponjoso. Sazonar el puré con una pizca de nuez moscada, sal y pimienta negra.
Una vez enfriado, agregar dos huevos y queso parmesano rallado. Revolver bien para combinar todos los productos.
Echar media taza de aceite de oliva en una sartén, agregar un diente de ajo y las espinacas picadas. Rehogar hasta que las espinacas estén suaves.
Retirar el diente de ajo y sazonar con sal.
Cortar los champiñones en láminas, ponerlas en una cacerola con un trozo de mantequilla y cocinar durante 15 minutos.
Cubrir el fondo de un molde desmontable de 18 cm con papel de hornear. Cubrir las paredes con mantequilla y espolvorear con pan rallado.
Colocar una capa de puré de patatas en el fondo, seguido de espinacas, encima de nuevo puré y lonchas de jamón cocido. Cubrir de nuevo con puré y poner los champiñones. Cubrir nuevamente con puré de patatas.
Espolvorear con pan rallado el apetitoso pastel de pastor y poner pequeños grumos de mantequilla en varios lugares.
Hornear el pastel salado a 200ºC en el horno precalentado con ventilador durante unos 25-30 minutos.
¡Servir el pastel de pastor con espinacas, champiñones y jamón cocido caliente con una ensalada de su elección!
¡Disfrutar!