Modo de preparación
Los callos de ternera bien limpios se hierven hasta que estén cocidos. Escurrir y cortar en trozos grandes.
Transferirlos a una sartén y sazonar con sal, pimienta negra y ajo prensado.
Regar bien con la mantequilla derretida o aceite y hornear el aperitivo en el horno precalentado a 180 grados hasta que esté dorado.
Los callos de ternera con mantequilla al horno se sirven calientes.
¡Buen provecho!