Modo de preparación
Se lava el pollo, se corta por la mitad y se pone en un molde de cerámica o en uno normal sobre papel de horno para que no se pegue.
La piel de la espalda se puede despegar suavemente con los dedos y el bolsillo resultante entre la carne de pollo y la piel se puede frotar con sal, ajedrea, ajo en polvo, pimienta negra y comino y colocar unos trozos de mantequilla en su interior.
Frotamos el pollo con las especias por todos lados, le damos la vuelta con la piel hacia arriba y colocamos encima finas y largas rodajas de mantequilla.
Lo metemos en horno precalentado a 180 grados y horneamos.
De vez en cuando, rociamos el pollo asado con la mantequilla derretida del fondo de la bandeja con una cuchara grande.
Cuando esté cocinado, le damos la vuelta y horneamos durante 5-10 minutos para conseguir una apetitosa costra dorada.
El pollo asado a la mantequilla está listo.