Modo de preparación
Comienza haciendo la salsa napolitana.
Se vierte aceite de oliva en una olla de fondo grueso. Agrega la cebolla picada, el ajo prensado, el puerro picado, la sal y cocina unos minutos a fuego moderado. Agrega los tomates de conserva y el puré de tomate concentrado y espolvorea con dos pizcas de condimento italiano.
Añada unos 200 ml de agua y deja cocer a fuego moderado durante 10 minutos. Se puede añadir un poco más de agua. Retira y espolvorea con un poco de pimienta negra para darle gusto y una cucharada de azúcar para suavizar la acidez de los tomates. Remueva con una cuchara de madera y retira del fuego.
Las berenjenas se lavan, no se pelan, se les quita el tallo y el fondo. También se retira la primera rebanada de la punta para que quede lo más plana posible. Se corta en rodajas de unos 3 mm, no debe ser más fina, porque se quemará rápidamente en el horno. Las berenjenas se disponen en una bandeja plana forrada con papel de hornear. Se riegan con aceite de oliva y se condimentan con hierbas italianas secas.
Hornea a 180 grados hasta que estén doradas. Retira y deja enfriar brevemente. Deben quedar un poco tibias para que sean más elásticas y se puedan enrollar fácilmente.
En un bol mezcla la ricotta con el huevo y agrega 3/4 taza de mozzarella rallada y un poco de queso parmesano rallado y perejil picado. Agrega un poco de jugo de limón, sal y pimienta al gusto. Mezcle bien hasta obtener una pasta.
Vierta unas cucharadas de salsa napolitana en una fuente apta para hornear. Deja que la sartén quede bien tapada.
Coloca cada trozo de berenjena sobre una tabla y pon 1 cucharada de la mezcla de ricotta en el medio, esparce uniformemente y enrolla.
Coloca en la bandeja encima de la salsa, dejando un poco de espacio entre los rollos de berenjena. Pon 1 cucharadita de salsa de tomate encima de cada rollo, luego cubra con mozzarella rallada.
Las berenjenas rellenas se hornean a 180 grados durante unos 20 minutos. Una vez que estén listas, se espolvorean con un poco de albahaca picada. Sirve tres rollitos en un plato, echándoles un poco de salsa por encima.
Los canelones de berenjena son muy sabrosos.
Nota: Unas berenjenas maravillosas con un relleno magnífico, aunque a mí personalmente me molesta su piel, pero es imposible hacerlas sin ella, porque al hornear se rompen. Es la piel la que las mantiene firmes, pero cualquiera puede eliminarla fácilmente después de servir.
La mezcla de especias italianas secas se puede encontrar en los supermercados.