Modo de preparación
Horno - 150 grados;
Molde rectangular 20/20 cm, forrado con papel de hornear;
Batidora de varillas eléctrica.
Separar las claras de las yemas de los 4 huevos. Batir las yemas y el azúcar hasta que queden blancas. Agregar la mantequilla en trocitos, la vainilla y las cáscaras de limón. Batir hasta obtener una mezcla esponjosa. La harina se agrega en dos porciones, se mezcla con una espátula. Echar la leche y continuar batiendo a baja velocidad.
En un bol, montar las claras hasta el punto de nieve y agregarlas con cuidado a la mezcla de yemas con ligeros movimientos envolventes. Pasar al molde y alisar. Hornear exactamente a 150 grados durante unos 90 minutos hasta que esté bien dorado. Enfriar y refrigerar durante unas 3 horas.
Luego cortar en cuadritos, habiendo previamente quitado finamente las partes exteriores del pastel. Servir con una bola de nata montada. En el medio de la nata se coloca un cuarto de trozo de limón, al que previamente se le ha raspado la piel, la idea es poder comerse también la piel del limón.
Un maravilloso bizcocho ligero con un fuerte sabor y aroma a limón. Se llama mágico porque se forman dos capas - una de bizcocho y la otra de natilla.
Es sumamente importante observar la temperatura, porque a mayor temperatura la torta se agrietará por arriba y las dos capas que se deberían formar quedarán separadas y no fundidas una con la otra.
La tarta mágica de natillas está lista.