Modo de preparación
Estos panecillos increíbles son típicos de la provincia de Jaén en la región de Andalucía.
Desde que probé los Ochíos me ha encantado su textura delicada y su corteza crujiente, y del sabor ni siguiera puedo encontrar una palabra, solo tienen que probarlos para saber.
Habitualmente los panecillos Ochíos se preparan con bastante aceite de oliva, tienen un ligero aroma a anís y pueden ser tanto dulces como salados. Además, dependiendo de la zona, se preparan de diferentes formas.
Os los presento en la versión salada y en su tradicional forma redonda.
En caso de que quiera hacerlos dulces, simplemente excluya la sal de la masa o reduzca a 1 pizca y agregue dos cucharadas de azúcar. También para los panecillos dulces hay que excluir el pimentón rojo y utilizar azúcar para espolvorear.
Aquí está la receta de estos panecillos encantadores:
Mezclar el agua y el aceite de oliva y calentarlos ligeramente hasta llegar a una temperatura de 37 grados. Desmenuzar la levadura en esta mezcla y remover.
Tamice la harina con la sal directamente en el bol con la mezcla liquida (agregue azúcar si está haciendo Ochíos dulces).
Agrega una cucharada de semillas de anís aromático y amasa una masa de pan.
La peculiaridad de la masa es que es grasosa y casi no se te pegará, pero aún así es necesario amasar durante al menos 10-15 minutos y, si hace falta, espolvorear un poco de harina.
Incluso si usa un robot de cocina para amasar la masa, no acorte el tiempo.
Una vez lista, hacer 12 bolas y colocarlas en una bandeja cubierta con papel de hornear, dejando espacio entre cada una para que no se peguen al doblar su volumen.
Pincelar con aceite de oliva, cubrir con un paño de cocina limpio y dejar reposar durante 1 hora en un lugar cálido. Es recomendable que el paño no toque la masa.
Pincelar de nuevo los Ochíos con aceite de oliva , ya que el anterior ya habrá sido absorbido.
Espolvorea con escamas de sal gruesa y pimentón dulce (o azúcar respectivamente para los dulces).
Ponga en un horno precalentado a 200 grados e inmediatamente baje la temperatura a 180 grados.
Hornee por 25 minutos o hasta que los Ochíos estén ligeramente dorados.
Durante los últimos 5 minutos puedes poner una capa de papel de aluminio encima para que no se queme el pimentón.
Estos maravillosos panecillos puedes comer tanto fríos como calientes. Úsalos para sandwiches, bodadillos o un delicioso desayuno, y si los hicieras dulces, lo ideal sería combinarlos con chocolate para untar o con mantequilla y mermelada.
Prueba los panecillos de aceite Ochíos y comparte tu opinión.
