Modo de preparación
Primero haga la crema para que se vaya enfriando mientras haces los eclairs.
Calentar 500 ml de leche a fuego moderado y derretir el chocolate y el azúcar.
Batir las yemas con el resto e la leche y la maicena.
Vierta la mezcla de yemas a la leche con chocolate, agregue la vainilla y revuelva a fuego lento hasta que la crema espese. Mientras está caliente, la crema no es muy espesa, pero después de que se enfríe quedará más firme.
Transfiera la crema de chocolate a un bol y cubra con film transparente o llene directamente una manga pastelera.
Para la masa choux, derrita la mantequilla en la leche a fuego moderado con una pizca de sal y 2 cucharaditas de azúcar.
Vierta la harina de golpe y revuelva hasta que la masa comience a separarse del fondo.
Retire del fuego y deje enfriar durante 10 minutos.
Precalienta el horno a 200 grados.
Agregue los huevos uno por uno a la masa, batiendo con una batidora. Hasta que uno no esté bien integrado, no pongas el siguiente. Debes obtener una pasta suave y pegajosa.
Rellenar la masa en una manga pastelera con boquilla medio rizada (adecuada para hacer eclairs alargados). Hacerlos sobre una bandeja forrada con papel de hornear y dejar espacio de 4 cm entre cada uno, porque se hinchan al hornear.
Hornea durante 20 minutos en el horno precalentado y luego abre la puerta y déjalos adentro por otros 10 minutos.
Retire la bandeja y espere a que los eclairs se enfríen por completo, luego córtelos y rellene el hueco con crema de chocolate.
Para la decoración, derrite el chocolate negro con un poco de leche, para que quede más liquido.
Rociar unas gotas o tiras sobre los deliciosos eclairs con relleno de chocolate.
¡Buen provecho!
