Modo de preparación
Preparamos un café espresso con la maquina de café, procurando de obtener una buena crema en la superficie.
Aagregamos jugo de limón recién exprimido y azúcar al gusto al café preparado (por supuesto, se puede tomar sin azúcar).
Servimos caliente con una rodaja de limón.
Espresso Romano es un café fuerte e intenso, con un pronunciado sabor cítrico y efecto tonificante.