Modo de preparación
En una olla a presión lo suficientemente grande para contener el pulpo, agregue medio limón y una copa de vino blanco. Vierta suficiente agua para cubrir el pulpo y ponga la tapa.
Lleve a ebullición y después de que hierva, reduzca el fuego.
Cocine el pulpo en la olla de presión durante 20 minutos. Está listo cuando pinchas con un tenedor y éste entra con facilidad.
Apaga el fuego y deja que el pulpo se enfríe en el agua de la cocción a temperatura ambiente. Separa los tentáculos del pulpo de la cabeza y, si lo desea, corte la cabeza en trozos.
Las patas las puedes cortar o dejar conforme están. Escurre y seque bien, luego pon los trozos de marisco en una cazuela de barro. Rocie con aceite de oliva y revuelva para que se cubran bien todas las patas.
Precalienta el horno a 200 grados. Rocie el pulpo con vino blanco, aceite de oliva y, por último, sazone con sal y pimienta negra.
Hornea durante aproximadamente 25 minutos, bañando periódicamente con la salsa formada en el fondo de la cazuela.
Vierta un buen chorrito de aceite de oliva, exprime el jugo de limón restante y espolvorea con perejil fresco picado y ajo prensado.
Rectifica de sal y pimienta y sirva este delicioso pulpo asado.
¡Buen apetito!