Modo de preparación
Triturar las galletas y mezclar con 100 g de mantequilla derretida. Mezclar y presionar la masa resultante en el fondo de un molde para pasteles.
Meter en la nevera para que se enfríe bien.
Batir la mantequilla restante (a temperatura ambiente) con el azúcar glass. Agregar la vainilla y el requesón y batir de nuevo.
Aparte montar la nata y añadirla a la crema de queso removiendo hasta que todo quede homogéneo. Extender la crema sobre la base de galletas, enfriar y cubrir con la mermelada.
El resultado es una tarta de queso ligera y sabrosa. Servir con una bola de helado casero.