Modo de preparación
Los albaricoques que utilices para hacer este licor deben estar tiernos y bien maduros. Lávalos, pártelos por la mitad y quita los huesos. Riega con el jugo de medio limón y cubra con el azúcar.
Vierta el agua sobre la fruta y colóquela a fuego moderado durante 10-15 minutos, luego retire del fuego y triture hasta obtener un puré suave. Deje que se enfríe y cuele a través de un colador fino.
Hay una pequeña peculiaridad que quiero agregar aquí:
Si quieres que tu licor sea más ligero, puedes verter el alcohol en este punto mientras el puré está caliente y remover a fuego lento durante 1-2 minutos, así se evaporará parte del alcohol etílico y la bebida se volverá más delicada y suave.
De lo contrario, proceda de la siguiente manera:
Después de que el puré de albaricoque se haya enfriado, mézclalo con el vino blanco y el anís seco (o el ouzo). Revuelva y pruebe. Si es necesario, agregue más azúcar (preferiblemente en polvo para que se derrita fácilmente) o diluya con más agua o alcohol. Puedes ajustarlo a tu gusto.
Vierta el licor de albaricoques terminado en botellas adecuadas, ciérrelas bien y guárdelas en el refrigerador durante 24 horas, después de lo cual la bebida estará lista para el consumo.
Sirva en vasos pequeños con cubitos de hielo y disfrute con una taza de café caliente o su postre favorito con licor de albaricoques.
¡Salud!