Modo de preparación
Elegimos tomates bien maduros. Los blanqueamos y los hacemos puré en una licuadora. Agregamos el resto de las verduras (sin perejil) y volvemos a triturar.
Sazonamos la sopa de tomate con sal, aceite de oliva y vinagre.
Después de eso, mezclamos suavemente con una batidora.
Transferimos la mezcla en un recipiente de cerámica o vidrio, tapamos y dejamos por lo menos una hora en el refrigerador, preferiblemente toda la noche.
Servimos el gazpacho espolvoreado con perejil.
El gazpacho también se conoce como ensalada líquida y es una sopa fría muy adecuada para los calurosos meses de verano.
¡Buen provecho!