Modo de preparación
Derrita la mantequilla y agregue la harina. Freírla brevemente removiendo constantemente para que no se queme. Poco a poco vierta la leche, revolviendo enérgicamente para evitar la formación de grumos.
Sazone la salsa bechamel con sal y pimienta y cocine a fuego lento hasta que espese.
Por último, añade la nuez moscada recién rallada y retira la salsa del fuego.
Trocea las espinacas en trozos grandes y saltéalas en mantequilla. Condimentar con sal y pimienta. Agregue el queso ricotta, el ajo picado y unas hojas de albahaca fresca. Remueve y retira la mezcla del fuego.
Comience a armar la lasaña colocando primero una capa de pasta en el fondo de la bandeja, cubra generosamente con la mezcla de espinacas y ricotta, coloque las rebanadas de mozzarella encima y cubra con salsa bechamel.
Repite hasta que te quedes sin productos.
Terminar la lasaña con una capa de salsa, espolvorear generosamente con parmesano rallado y llevar al horno a 180 grados durante 35-40 minutos.