Modo de preparación
Precalentamos el horno a 180 grados y primero comenzamos con preparar el bizcocho.
Pintar el fondo de un molde para tartas de 20 cm con fondo desmontable y espolvorear con harina para evitar que se pegue la tarta.
Poner la mantequilla, el azúcar, el azúcar de vainilla y la esencia de vainilla en un recipiente aparte. Batir bien con la batidora hasta obtener una mezcla cremosa.
Agregar los huevos uno a uno, luego la harina, batir hasta obtener una mezcla homogénea.
Verter en el molde y hornear durante unos 20-25 minutos hasta que esté listo. Con la ayuda de un palillo, comprobamos si el bizcocho está horneado, si no se pega nada al palito, entonces está listo. Después de que esté horneado, sácalo y déjalo enfriar sobre una rejilla.
Mientras se enfría el bizcocho hacemos la crema de mantequilla.
En un tazón grande, batir la mantequilla y el azúcar hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Agregar la esencia de vainilla y la leche, y volver a batir.
Desmenuzar el bizcocho enfriado en migas y mezclar con la crema de mantequilla preparada.
Formar bolitas y clavar un palito en cada una de ellas. Colocarlas en un recipiente adecuado y meterlas en el congelador durante 10-15 minutos.
Derretir el chocolate blanco en un horno de microondas o al baño maría y agregar el colorante. Mezclar hasta obtener una mezcla muy suave.
En otro recipiente, también derretimos el chocolate con leche. Vierto los chocolates en vasos altos porque así me viene más cómodo.
Vierta las pequeñas bolas de azúcar en un tazón pequeño.
Sacar las bolitas enfriadas del congelador y sumergir la mitad de ellas una por una en la mezcla rosa (chocolate blanco) y luego espolvoree con bolas de azúcar. Sumerja la otra mitad en el chocolate con leche y vuelva a espolvorear con bolitas de colores.
Pegar cada una en un trozo de poliestireno para que escurra el exceso de chocolate.
Después de que estén listos, póngalos en el refrigerador para que se endurezcan.
Estos cake pops son perfectos para una fiesta, cumpleaños, invitados o simplemente para tratar a un ser querido. Toman mucho tiempo, pero vale la pena.
El Ramo de Cake Pops es maravilloso.