Modo de preparación
Este timbal tiene una clásica combinación de sabores, muy fácil de preparar y de apariencia espectacular.
Los productos son para una porción, lo cual es ideal para compartir entre dos personas en compañía de una bebida favorita.
He indicado que la berenjena debe ser grande, porque así nos aseguraremos de cortar suficientes trozos iguales para que quede hermoso nuestro aperitivo de berenjena.
Lave la verdura, corte los extremos y, si lo desea, también puede pelarla. A mí me queda mejor con la corteza, y me encanta, pero podéis quitarla, según vuestra preferencia.
Corta a lo largo en rodajas finas con un cortador fino para que sean uniformes en grosor.
Ponga en un recipiente con agua salada durante 30 minutos para salga el jugo amargo, luego lava bien y seca con papel de cocina
Disponga los trozos finos de berenjena en una bandeja cubierta con papel de horno, previamente engrasada con un poco de aceite de oliva.
Rocíe con más grasa y cocine hasta que estén ligeramente dorados, teniendo cuidado de no quemarlos ya que son delgados. Es posible que tengas que hornearlos en dos tandas.
Coger un bol pequeño de 12 cm de diámetro y ligeramente ahusado hacia la base, cubrir con una capa de film transparente, dejando unos 7 cm sobresaliendo del exterior.
Cubra el recipiente con la berenjena asada, colocándolo en forma de abanico con los extremos hacia afuera. Ponga salsa de tomate en el fondo (yo uso una preparada que tiene un ligero sabor a ajo, aceite de oliva y albahaca) Encima de la salsa, ponga la buena mozzarella de búfala, seca del líquido en el que estaba.
Espolvorea con un poco de sal y pimienta y dobla los extremos sobresalientes de la berenjena hacia adentro. Espolvorea con más sal, si es necesario, y ajo en polvo o rocía entre las capas.
Saque el timbal del cuenco tirando con los extremos del papel de aluminio y fíjelo para obtener la forma correcta.
Coloque en una fuente ligeramente engrasada con los bordes hacia adentro, ponga un tomate cherry en rodajas en el centro y hornee durante unos 10 minutos en un horno precalentado a 200-210 grados.
Es importante que el paquete quede bien sellado para que no se salga el queso.
Sirva el aperitivo caliente (antes de colocarlo en el plato de servir, con un trozo de papel de cocina absorba el líquido que inevitablemente habrá separado la mozzarella).
Espolvorea el timbal de berenjena con escamas de parmesano y albahaca fresca picada u otro condimento verde a tu gusto.
¡Disfrute de su comida!