Modo de preparación
Echa en un bol la harina de espelta y añade el aceite de oliva, las claras ligeramente batidas y los dos tipos de zumo de cítricos en los que previamente has puesto el bicarbonato.
Agregue el coco rallado, la sal y el azúcar y mezcle bien con una cuchara. La masa no se vuelve espesa y no se amasa, pero aún así, si parece delgada, espolvorea más harina de espelta. Las galletas deben poder moldearse fácilmente con una cuchara.
En un molde ancho cubierto con papel de horno, coloque una cucharada de masa y forme las galletas a cierta distancia entre sí (las galletas deben tener un grosor de 4-5 mm). Espolvorea con más coco rallado, si lo deseas.
Colóquelos en un horno precalentado a 180 grados hasta que se pongan dorados y huelan bien (unos 16-17 minutos, depende del horno).
Cuando saques las galletas, todavía estarán suaves, pero luego se endurecerán un poco y quedarán crujientes. Fácil, saludable y delicioso: ¡la compañía perfecta para cualquier taza de café, té o leche!