Modo de preparación
Desmenuza la levadura en el agua ligeramente tibia con el azúcar y déjala activar durante unos minutos.
Tamice la harina en un bol y haga un hueco en el medio. Vierta aceite de oliva, sal y levadura. Amasa una masa suave y elástica y dejarla en un bol tapada con un paño durante 30-40 minutos o hasta que duplique su volumen.
Forme una bola con la masa leudada y extiéndala hasta formar una costra muy fina sobre una superficie enharinada o directamente sobre una hoja de papel de horno.
Distribuya el queso cortado en tiras finas dejando 4-5 cm de los bordes, que luego doblas hacia adentro y sellas. Pasa con el rodillo para aplanar y adelgazar lo máximo posible. Esto te dará una masa de pizza con relleno de queso.
Unte la superficie de la pizza con la salsa de tomate, espolvoree con orégano y coloque encima los trozos de mozzarella fresca y fiambre. Termina espolvoreando con la mozzarella rallada.
Hornea la pizza a 220 grados durante 15 minutos en el horno precalentado.
¡Disfrute de su comida!