Mandrágora

Yordanka Kovacheva
Traducido por
Yordanka Kovacheva
Raíces de Mandrágora

Mandrágora es un género de plantas que pertenece a la familia de las solanáceas. El género incluye varias especies que se distribuyen en el Mediterráneo, el Himalaya y algunas partes de Asia. Su nombre proviene de las palabras griegas "mandra" - estable y "agauros" - dañino.

La mandrágora alcanza una altura de hasta 30 cm y tiene un olor fuerte. Sus hojas son suaves y ovaladas, formando un círculo alrededor del tallo. Las flores se asemejan a una pequeña bola formada por cinco pétalos. Pueden ser de color azul, verdoso pálido o violáceo.

La mandrágora florece en primavera. El rizoma es marrón por fuera y blanco por dentro. Con el paso de los años, puede alcanzar una longitud de 60-80 cm.

Composición de la mandrágora

Las raíces de mandrágora contienen alcaloides psicoactivos. Además de los alcaloides, la planta también es rica en otros compuestos patógenos. La mandrágora contiene atropina y escopolamina /el primer suero de la verdad/. En teoría, estas sustancias son muy peligrosas e incluso mortales.

Historia de la mandrágora

Mandrágora planta

La mandrágora es considerada una de las plantas mágicas del ocultismo más poderosas. La mandrágora atrae la atención de los magos por la forma de su raíz, que se asemeja a una persona.

Dividen la mandrágora en raíz masculina y femenina, según su apariencia.

En la antigüedad, se creía que la mandrágora podía matar a una persona si se la arrancaba de raíz. Cuando se extrajo, la raíz atravesó la conciencia de una persona con un fuerte grito. Los antiguos árabes creían que la raíz de mandrágora estaba poseída por un demonio. Los antiguos griegos consideraban que la mandrágora era la planta cuyo jugo Circe convertía en cerdos a los compañeros de Odiseo.

Otra creencia sobre la mandrágora, que se remonta a la Edad Media, afirma que las brujas arrancaban la planta mágica por la noche bajo la horca en la que se colgaba a los criminales impenitentes, luego lavaban la raíz con vino y la envolvían en terciopelo y seda, la alimentaban con pan robado de las iglesias durante la comunión. Finalmente, llevaban la raíz al Diablo.

Los ingredientes alucinógenos de la mandrágora se manifiestan cuando algunas de sus sustancias se frotan en la piel y llegan al torrente sanguíneo. Esto explica en parte por qué las brujas solían entrar en trance y imaginarse volando sobre escobas y otros objetos.

La mandrágora se utilizaba como ingrediente en pociones de amor. La raíz también se utilizaba como remedio contra la magia. Se cree que con la mandrágora se puede hacer un fuerte amuleto para adquirir dinero.

En un manuscrito antiguo, la mandrágora se representa como el árbol del conocimiento del que Adán y Eva arrancaron el fruto prohibido. En el Antiguo Testamento, la mandrágora también se conoce con el nombre de "manzana del amor".

Selección y almacenamiento de mandrágora

Mandrágora

Casi nunca se encuentran raíces de mandrágora con forma humana. Por lo general, es muy difícil encontrar esta planta en Europa, a menos que se cultive en jardines privados o invernaderos. En nuestro país no se encuentra mandrágora, se puede comprar en las grandes tiendas de ocultismo, pero a precios altos. La raíz de mandrágora se vende prensada y presentada en forma de tintura.

Uso de mandrágora

Incluso los asirios usaban la mandrágora como un fuerte analgésico e hipnótico. Hipócrates creía que la mandrágora en pequeñas dosis era un remedio eficaz contra la depresión y el miedo. Se considera que la mandrágora es un poderoso afrodisíaco que otorga a su dueño un gran poder sexual.

Varias fuentes describen numerosas formas de utilizar la mandrágora. El jugo de mandrágora se extrae de las hojas, frutos o tallos.

El uso moderno de la mandrágora se asocia principalmente con creencias vudú. Se utiliza en diversos aceites, pociones, inciensos, amuletos.

Daños que puede causar la mandrágora

Como ocurre con la mayoría de las hierbas, la sobredosis de mandrágora tiene consecuencias desagradables para la salud. Los signos de intoxicación son náuseas, espasmos, somnolencia, debilidad muscular, alucinaciones. No se excluyen daños irreparables: coma, pérdida de memoria e incluso la muerte. Debido a los aspectos negativos enumerados, experimentar con mandrágora es completamente indeseable.

Facebook
Favoritos
Twitter
Pinterest

Valoración

4
50
41
30
20
10
Añade tu valoración

Comentarios

Enviar