Modo de preparación
He probado el hígado de cerdo frito de diferentes maneras y en la mayoría de los casos se queda bastante seco.
Por fin, he encontrado la manera de prepararlo de modo que quede super tierno y delicioso. La comparto con vosotros:
Cortamos el hígado en filetes finos (si compras bandejas del supermercado, muchas veces el hígado viene ya fileteado) Lavamos muy bien con agua helada y secamos perfectamente. Salpimentamos.
Calentamos el aceite a fuego moderado.
Pasamos cada filete de hígado por la harina de maíz (especial para rebozar o podemos usar sémola de maíz pero molida para que quede más fina).
Freímos los filetes hasta el punto deseado.
Y así de simple es la preparación de un hígado frito super tierno y suave.
Servimos como aperitivo y tapa, o acompañamos con una ensalada y guarnición a nuestra elección.
¡Buen apetito!