Modo de preparación
Cortamos la carne de ternera en trozos de 2-2.5 cm aproximadamente. Salpimentamos y pasamos por una mezcla de especias secas - romero, tomillo y hojas de laurel troceadas. Rociamos con el aceite de oliva y blandy y mezclamos bien con las manos. Dejamos reposar durante 40 minutos a temperatura ambiente (pero que no supere los 20 grados).
Limpiamos los puerros y cortamos en rodajas o trocitos relativamente grandes.
Calentamos el aceite de girasol y rehogamos los puerros con un poco de sal. Una vez que estén tiernos, agregamos los trozos de carne previamente pasados por harina. Doramos la carne, removiendo para que no se nos queme el puerro.
Vertemos el vino y seguimos removiendo para que se mezcle con los jugos de la carne y la verdura. Reducimos casi por completo y entonces agregamos el caldo, dejando una parte para ir añadiendo si es necesario en el proceso de cocción.
Cocinamos a fuego moderado durante 1 hora, o a fuego lento - hora y media (con la olla tapada). Finalmente añadimos el caldo si nos haya sobrado, y si no - agua. Eso dependerá del nuestro gusto y cómo preferimos el guiso - más espeso, o más caldoso. Si lo dejamos espeso será más un estofado.
Añadimos la pasta de tomate al guiso, rectificamos de sal y cocinamos durante unos 10 minutos más el guiso de ternera.
Nota: La pasta de tomate se puede sustituir por carne de pimiento choricero de las que venden en unos pequeños frascos de cristal.
Servimos el guiso de ternera con puerros espolvoreado con perejil fresco picado.
¡Buen provecho!
