Modo de preparación
Limpiar el pescado arrancándole la cabeza y pasando el dedo a lo largo por el vientre. Retire las vísceras y la espina y deje parte de la cola para que se sostengan unidos los dos filetes. Lave bien cada pescado con agua corriente.
Disponer los filetes de anchoa/boquerón limpios en un recipiente adecuado y verter encima una mezcla de agua fría, vinagre de manzana, sidra de manzana y sal (bien disuelta en el liquido). Puedes ajustar la cantidad de sal a tu gusto, es decir, si no quieres que el pescado quede salado, pon menos sal. Disponer encima las chalotas, cortadas en tiras finas y espolvorear con la pimienta. Para un sabor más intenso, puedes disponer chalotas y espolvorear pimienta entre cada capa de pescaditos.
Cierra el recipiente o envuélvelo en film transparente y refrigera de dos a seis horas. Cuanto más tiempo permanezca el boquerón en la marinada, más absorberá de ella. Debes tener cuidado porque si reposa más de 6 horas puede volverse demasiado ácido/agrio o salado. Recomiendo probarlo después de pasar dos horas.
Los boquerones terminados de marinar se volverán blancos debido a la sal y el vinagre. Retire los filetes, escúrralos y colócalos bien ordenados en otro recipiente limpio. Después de acomodarlos, vierta el aceite de oliva sobre ellos para que los cubra por completo. Ralla solo la parte amarilla de la cáscara de limón por encima y espolvorea con arándanos rojos deshidratados o uvas pasas. Deje reposar en el frigorífico durante la noche.
Antes de servir, disponer el pescado en platos de porciones y espolvorea con unas gotas de la salsa picante Tabasco.
¡Buen provecho!