Modo de preparación
Limpiar los calabacines y cortarlos con un pelapatatas en tiras finas. Colocarlos sobre servilletas de papel para eliminar el agua.
Verter el aceite de oliva, la cebolla picada y el ajo prensado en una olla profunda y dejar unos minutos para que se vuelva transparente. Agregar la carne picada y revolver para formar migas.
Añadir los tomates, la albahaca, el perejil, el orégano, la sal, la pimienta, el puré de tomate y el laurel y dejar a fuego moderado durante unos 30 minutos.
En un tazón, combinar la ricota con el huevo, el perejil, el queso parmesano rallado, (aproximadamente 150 g), la sal y la pimienta negra. Mezclar bien hasta obtener una mezcla uniforme.
En una sartén, poner primero la carne picada con salsa de tomate, luego colocar capas finas de calabacín, untar con la salsa de ricotta, espolvorear de nuevo parmesano y ponga una capa de calabacín, etc. Terminar con carne picada y parmesano rallado. Espolvorear granos de pimienta entre las capas.
Hornear la lasaña a 180 grados durante unos 45-50 minutos.
La lasaña de calabacín sin bechamel está muy rica.
