Modo de preparación
Limpiar las gambas quitando las cabezas, pelando las cáscaras y dejando solo la cola. Cortar ligeramente a lo largo de la columna vertebral y quitar el nervio delgado.
No tire las cabezas de gambas, ya que se pueden usar para hacer suntuosos caldos para mariscos o sopas de verduras.
Picar el ajo fresco y el perejil. Reservar unas dos cucharadas de perejil, y poner la otra cantidad junto con el ajo para sofreír en una sartén con la mantequilla y el aceite de oliva.
Después de unos 2 minutos, agregar las gambas. Cuando las colas se vuelvan de color rosa/naranja (1-2 minutos o dependiendo del tamaño) y la carne se vuelva ligeramente blanca, vierta inmediatamente el vino y revuelva suavemente para permitir que el alcohol se evapore.
Las gambas se cocinan rápidamente para mantenerlos tiernos y deliciosos. Si se cocinan mucho pierden su textura tierna y su sabor.
Incorporar un poco más de mantequilla, sal y la mitad del jugo de 1 limón. Mezclar brevemente, espolvorear con el perejil reservado y servir el plato de gambas rápido y delicioso.
Servir con jugo de limón por separado, para que cualquiera que lo desee pueda agregar sabor adicional.
Gambas con vino blanco y limón - un gran aperitivo de verano acompañado de una copa de vino blanco bien frío.
¡Disfrute de su comida!