Modo de preparación
Lavamos bien los calabacines. No hace falta pelarlos. Los cortamos en rodajas de 3mm de grosor. No hay problema si son un poquito más gruesos.
Echamos la harina, el orégano, la pimienta y la sal en una bolsa de plástico grande.
Vamos poniendo las rodajas de calabacín en la bolsa por tandas y agitamos para que se queden bien rebozados de harina y especias.
Los sacamos de la bolsa y colocamos en una bandeja plana forrada con papel de hornear. Esparcimos el pan rallado or encima y rociamos con un buen chorro de aceite de oliva.
Horneamos a 180 grados hasta que estén bien dorados. Servimos los calabacines al horno con eneldo fresco picado y salsa de yogur con ajo.
¡Receta fácil, rapida y muy rica de sabor!
Los calabacines crujientes al horno están listos.
