Modo de preparación
Este plato serbio está muy cerca de nuestros guisos y estofados de ternera, por lo que seguramente atraerá a todos. La Muckalica es rica en sabor y se puede comer tanto como aperitivo como plato principal.
Lo que lo caracteriza, y lo que lo distingue de algunos guisos similares similares, es que en Leskovacka Muckalica la carne se prepara a la parrilla. Ese es el encanto de este delicioso plato, que gracias a la parrilla adquiere un sabor espectacular.
La carne de cerdo se puede cortar en filetes y se puede sellar de manera más conveniente en una parrilla fuerte. La otra opción es ensartarla en brochetas.
El objetivo no es cocinarla completamente, sino que quede jugosa por dentro, porque luego tendrá otro tratamiento térmico.
Sellada en la parrilla (tal vez una sartén grill), la carne se deja reposar antes de cortarla en pedazos si se trata de filetes grandes.
Una vez hecha esta parte de la preparación, comenzamos con las verduras.
La cebolla se corta en julianas finas y se fríe hasta que esté ligeramente dorada en el aceite. Como no me gustan los trozos de cebolla muy grandes en mis platos, la pico muy fina, pero esto es cuestión de gustos.
Los pimientos asados y secos finamente picados, así como el bacon, se agregan a la cebolla sofrita. Ya sea que uses bacon o jamón cocido, mi consejo es elegir aquellos que no tengan un sabor ahumado fuerte para que no domine el plato.
Freírlos brevemente, agregar la carne a la parrilla en trozos y verter suficiente agua para cubrir los productos.
Poner las verduras secas, la sal, la pimienta negra y el comino y dejar cocer a fuego lento durante 1 hora bajo la tapa.
Si lo vas a preparar como aperitivo, puedes aumentar el fuego al final para que el líquido hierva y quede en grasa. Cuando es de plato principal, prefiero que tenga más caldo.
Es el momento del ajo y los tomates. Se limpian y muelen o pican finamente. Se añaden al plato y se deja cocinar otros 20 minutos.
El guiso serbio se sirve tibio y, si se desea, se espolvorea con hojas de perejil cortadas en trozos grandes.
¡Buen provecho!