Modo de preparación
Encender el horno para calentar hasta 200 grados.
Dividir la masa de hojaldre en dos rectángulos delgados iguales y coloca uno en una fuente rectangular cubierta con papel de hornear para que los bordes sobresalgan y se doblen.
Colocar los arándanos frescos encima y extender la mermelada uniformemente sobre ellos. Cubrir con la segunda capa de masa pellizcando los bordes.
Si te sobra masa, decora con diferentes formas de la misma como más te guste.
Pintar con yema de huevo batida con un poco de agua y espolvorear con azúcar - moreno o blanco cristal.
Hornear el pastel hasta que esté dorado.
El pastel de hojaldre con arándanos está listo.
Buen provecho.